El domingo 21 de febrero di un tranquilo paseo por la Quinta de los Molinos, pues ya me habían dicho que los almendros estaban en flor.
Efectivamente, en diferentes "finquitas" por todo el parque, aparecían los árboles con tonalidades rosáceas y blancas. Todo un espectáculo que se ha anticipado mucho a la primavera, quizás por el tiempo tan loco que tenemos y el poco frío que ha hecho este invierno.
Bonitas fotos.
ResponderEliminarDa gusto que esté llegando la primavera: la luz, el calor y los almendros en flor.
Gracias! Sí, la verdad que da gusto este despertar a la vida.
EliminarSaludos.